La "Familia Misionera Verbum Dei" es una realidad de la Iglesia
Católica al servicio de la Palabra de Dios, a la cual pertenecen todos los
fieles que comparten la misma espiritualidad y misión "Verbum Dei". La FaMVD,
con el lema de los primeros discípulos de Jesús: "Nos
dedicaremos a la oración y el ministerio de la Palabra", y el
espíritu de la primera comunidad cristiana, concreta y centra su misión
específica en la Palabra de Dios: orar la Palabra de Dios, asimilándola
hasta hacerla vida propia, transformándonos en ella y enseñándola
así a los demás, para que la oren, la vivan y la enseñen vivencialmente
a otros.
El carisma "Verbum Dei" tiene su origen en 1958 con el movimiento apostólico de
predicación llamado "Convivencias", generado por el P. Jaime Bonet en la
diócesis de Mallorca (España).
Su identidad queda expresada en su mismo nombre: ser "familia",
profundamente "misionera", al servicio del anuncio de la
"Palabra de Dios". La FaMVD reúne en su seno personas o grupos de todo
estado de vida, edad, cultura y condición social unidos en la misma
vocación a ser "Verbum Dei", es decir, reproducir y revelar el rostro de Dios
Uno y Trino de forma vivencial, identificándose personal y comunitariamente lo
más posible con Jesús, el Verbo de Dios hecho carne.
La evangelización a través de la Palabra de Dios, misión propia
de la FaMVD, se despliega como un dinamismo con capacidad de transformación de
las personas, de las realidades y de la sociedad. La FaMVD participa, así, en
la misión de la Iglesia Universal contribuyendo a que cada persona pueda vivir
la plenitud de su vocación al amor, de su ser discípulo y apóstol
de Jesús, con un sentido de pertenencia eclesial con el que despliegue la
dimensión comunitaria y misionera de la fe, y haga que se sienta corresponsable
en la tarea evangelizadora de la Iglesia.